Es una técnica de masaje manual que se realiza con movimientos suaves, lentos y repetitivos. Su eficacia ha sido aprobada y es un tratamiento que se ha estudiado científicamente. Esta técnica se ha vuelto muy popular y vital para tratar los síntomas después de cualquier tipo de intervención estética como la liposucción, la mamoplastia de aumento o reducción, la abdominoplastia, el lifting, entre otras.
el drenaje linfático mejora la circulación linfática lo que contribuye a acelerar la recuperación, disminuir el dolor y la inflamación, mejorar la cicatrización de los tejidos y eliminar edemas post-quirúrgicos. Además, es una excelente técnica para evitar la fibrosis subcutánea, hidratar la piel y favorecer la disminución de hematomas. Este tratamiento tiene un efecto directo sobre el sistema nervioso central lo cual libera endorfinas (sustancia que relaja y disminuye el dolor) favoreciendo a todo el sistema inmunológico en general. Celulitis, estrés, arrugas y bolsas debajo de los ojos son también problemas estéticos tratables por medio del drenaje linfático.
Para todas y todos aquellos que desean acelerar su proceso de recuperación, el drenaje linfático, junto con una sana alimentación, es una excelente alternativa